"Familia Albertiana" es un movimiento nuevo que desea compartir el carisma y la espiritualidad con los laicos


Me gustaría tener una mirada así.
Una mirada que dice a quien mira...
... ¡no estás solo!

Esa mirada que te contempla y dice...
... ¡no todo es sucio en tu corazón!

La mirada que se aparta con cariño...
... para hacer como que no te ha visto meter la pata

Yo quiero una mirada así de verdad.
Una mirada que llena de confianza.
Una mirada que llena de paz.
Una mirada que transmita calma.
Una mirada que te descubre lo que realmente eres.

Esa mirada que ilumina el rostro
de quien se siente contemplado.

Esa mirada, Padre, con que Tú nos miras.
Esa mirada que tatuaría en mi piel
para recordarla cada día.

"No hay nada más bello
que un rostro iluminado
por una mirada de confianza y de dulzura"

(Olivier Clément)


La bondad no consiste en hablar de lo que es bueno, sino en hacerlo.

¡UN NUEVO CURSO ESCOLAR..!
Comienza el ajetreo, las prisas, los agobios, las vacaciones llaman a su fin.
Se reanuda el trabajo con ilusión (?), las rutinas, lo de siempre...
Y en ese "oleaje" está Él que nos llama a ser "levadura en la masa"

Sí, hay que ser levadura
Hay que ser levadura en medio del mundo:
desde la sencillez de cada día,
desde el trabajo de cada hora,
desde la palabra que anima en cada instante.


Hay que ser levadura para que el mundo crea
que hay otros valores, otras realidades
por encima de las meramente materiales
que hacen felices a muchos hombres y mujeres
que ponen su confianza en Dios y en su palabra.

Hay que ser levadura y confiar en que Él pone lo demás
pone la fe en nuestro corazón, la confianza en nuestra vida,
la alegría muy adentro de nosotros mismos
para que sepamos que Él actúa por nosotros
y hace crecer en cada uno lo que parece
que es imposible ante los ojos de los demás.